La corona o el séptimo chakra está en la parte superior de la cabeza. Así como la raíz o el primer chakra nos conecta con la madre tierra, el chakra de la corona es nuestra conexión con el universo. De hecho, el séptimo chakra distribuye la energía universal o fuerza vital en los otros seis chakras que están debajo de él. En sánscrito, el chakra de la corona se llama Sahasrara (el chakra mil veces) porque está representado como un loto con mil pétalos blancos.
Ubicación del séptimo chakraCentro superior de la cabeza, línea media entre las orejas.
color– blanco o morado
Órganos y funciones asociados con el chakra de la corona.– Cabeza, cerebro, oídos, ojos, glándula pineal, sistema esquelético y muscular y piel.
Chakras abiertos y equilibrados
Cuando los siete chakras se abren de manera óptima (es decir, ni demasiado, ni demasiado poco), giran con energía y la transmiten por todo el cuerpo. Esto ayuda al individuo a funcionar correctamente física y mentalmente.
Por otro lado, el individuo puede experimentar frustración, enfermedad y pensamientos destructivos incluso si un chakra está bloqueado o abierto demasiado. Los problemas de aprendizaje, concentración y memoria, enfermedades físicas, trastornos crónicos, dolor y depresión se remontan a chakras desequilibrados.
Por tanto, un equilibrio óptimo de los chakras es fundamental.
Séptimo chakra hiperactivo
En el modo hiperactivo (o hiperactivo), el séptimo chakra puede hacer que una persona tenga pensamientos obsesivos. Estas personas viven en el pasado o piensan constantemente en el futuro. El chakra de la coronilla hiperactivo también puede conducir a una espiritualidad obsesiva, de modo que se descuiden los demás deberes.
Chakra de la corona hipoactivo
Un bloqueo en el chakra de la corona puede dejarlo inactivo. Una persona así tiende a ser rígida, egoísta y espiritualmente desorientada. Hay depresión general, falta de alegría y pérdida de significado o identidad en su vida. El chakra de la corona bloqueado también puede conducir a pensamientos egoístas, incapacidad para ver el panorama general de la vida y una falta generalizada de valores y ética.
Una persona con un chakra coronario cerrado no recibe la guía del Poder Supremo; Este hecho tiende a molestarlo, pero también se siente indigno de cualquier ayuda en primer lugar.
Equilibrar el séptimo chakra
El chakra de la corona bloqueado o hiperactivo puede provocar diversas dolencias físicas como depresión, dolores de cabeza, problemas neurológicos, etc. Parkinson, Alzheimer, parálisis, epilepsia, esclerosis múltiple, senilidad, demencia, etc. también están asociados con un desequilibrio en el séptimo chakra.
Hay algunas técnicas recomendadas por expertos que pueden ayudarnos a aprovechar al máximo el séptimo chakra. La clave aquí es abrir el chakra correctamente: ni demasiado, ni demasiado poco.
El chakra de la corona es nuestra conexión con la divinidad; Es el portal a través del cual la energía vital ingresa a nuestro cuerpo. Sin esta energía, las personas no pueden funcionar correctamente y se sienten desconectadas de sí mismas y de los demás. Al equilibrar y fortalecer el Séptimo Chakra, podemos conectarnos con la Fuerza Superior para recibir su amor, que luego se puede compartir con nuestros semejantes.